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Valladolid, 25/10/2007
Un Doctorado Honoris Causa especial: se concede tanto por los méritos científicos de César Camacho como por su importantísima labor de cooperación al desarrollo a través de la ciencia
Es el primer matemático que recibe la máxima distinción honorífica de la Universidad de Valladolid
Es el primer doctorado Honoris Causa propuesto por un Instituto Universitario de investigación
La Universidad de Valladolid celebra hoy la investidura del mátemático peruano César Camacho como Doctor Honoris Causa por esta universidad.
Si es cierto que todas las investiduras de doctor Honoris Causa son importantes y suponen un hito en la vida de cualquier universidad, la ceremonia de hoy tiene varios aspectos que la convierten en excepcional, tal como señala el catedrático Felipe Cano, matemático de la Universidad de Valladolid y director del Instituto Interuniversitario de Iberoamérica de la UVa, que actúa como padrino del doctorado, ya que fue este Instituto el que propuso a César Camacho para este nombramiento.
En primer lugar, la propia condición del científico que recibe este doctorado, que se le concedió por dos motivos: en primer lugar, porque César Camacho es un matemático de altísimo prestigio en el ámbito internacional, en el terreno de los sistemas dinámicos, tanto en lo referente a matemática pura como aplicada. Ya este mérito sería de por sí una razón de peso suficiente y sobrada para concederle este nombramiento de doctor honoris causa.
Pero a su condición científica de excelencia se une la incesante labor de cooperación al desarrollo que el profesor Camacho ha venido desarrollando en los países de la zona de Los Andes (Perú, Ecuador y Bolivia fundamentalmente), con la ciencia como herramienta de desarrollo. Este trabajo lo ha venido desarrollando a través del Instituto de Matemática Pura y Aplicada de Río de Janeiro (IMPA), una de las más importantes instituciones mundiales de Matemática de la actualidad, y del que César Camacho es director desde el año 2003.
También este segundo motivo hubiera sido suficiente para concederle el grado de Doctor Honoris Causa, porque en mucha medida a sus iniciativas se ha debido la formación científica avanzada de un numeroso grupo de jóvenes matemáticos en todos estos países andinos, lo que ha supuesto el alcance y consolidación de un nivel científico muy notable en el área de las matemáticas en estos países iberoamericanos.
La iniciativa del Instituto Interuniversitario de Iberoamérica refleja la nueva composición de la universidad española y el creciente protagonismo de los Institutos de Investigación
Además de las condiciones personales del propio profesor investido, otras dos razones señala Felipe Cano como excepcionales en esta ceremonia de hoy. El hecho de ser el primer matemático investido doctor Honoris Causa por la Universidad de Valladolid, "circunstancia paradójica –afirma el profesor Cano-, ya que la Universidad de Valladolid precisamente es conocida a nivel internacional por el alto prestigio de sus matemáticos.
Y, por último, el hecho de que César Camacho es el primer doctor Honoris Causa que ha sido propuesto para este nombramiento por un Instituto Universitario. "Este dato refleja claramente –explica el doctor Cano Torres- la nueva constitución de las universidades españolas, en las que el tradicional protagonismo de las Facultades y Departamentos se está viendo enriquecido con un papel creciente, sobre todo en el terreno de la investigación científica, de los Institutos Universitarios como centros especializados en la investigación y en la formación especializada de posgrado".
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